Newton en cuarentena
Días pasados leí que en 1665, debido a la peste bubónica, Isaac Newton fue puesto en cuarentena. Fue entonces que se dedicó a meditar, reflexionar, pensar, hacer cálculos. Así fue que desarrolló su teoría sobre la óptica y formuló las leyes del movimiento y la gravedad.
No creo que Newton se haya sentido "atrapado sin salida", o aislado sin recursos.
Esta sensación de estar "atrapado sin salida" hoy está dominando al mundo. Al mundo de los humanos, no sé si el de las plantas y los animales...
Para nosotros es sin dudas, una sensación bastante desagradable. Una sensación de vulnerabilidad, impotencia. Sin embargo, al margen de las preocupaciones que acompañan el momento, no deja de tener ese sabor particular de las experiencias únicas. Se trata de una experiencia que será memorable en la historia de la humanidad. Cuando el mundo se detuvo por completo, nosotros estuvimos ahí. Lo vivimos para contarlo.
A lo mejor todo esto se deba a algún tipo de llamado de la Naturaleza, de Dios, de una inteligencia superior o como prefieras concebir esa fuerza magnánima capaz de hacer detener al mundo entero con algo tan microscópico y perfecto que se burla de los esfuerzos de los científicos más capacitados del planeta y de toda la aparatología super sofisticada con la que hoy contamos.
Si se trata de un llamado, de una advertencia, por parte de alguna inteligencia superior, ¿habrá sido para que revisemos nuestro estilo de vida y lo corrijamos?. ¿Se trata de un tirón de orejas para forzarnos a unirnos como raza, dejar de lado diferencias secundarias para atender a lo primordial? ¿Habrá sido para imponer a la fuerza la paz en el mundo: el modelo de un mundo pacífico y tranquilo?
¿Será para que fuerzas superiores nos demuestren su existencia y su supremacía?
En el plano personal, a lo mejor este fenómeno indique que ya es hora de aprender a dominar algunas habilidades humanas que se encuentran todavía en estado de latencia. Incursionar con responsable curiosidad en los alcances incuestionables del mundo espiritual y de los dramáticos cambios y movimientos que esas fuerzas invisibles al ojo humano, esa energía espiritual, esas inteligencias superiores, son capaces de producir de manera tan elegante.
Crear un virus; detener el mundo.
Obligar al aislamiento; llamar a la reflexión. Con solo algo microscópico como un virus, paralizar algo gigantesco como la humanidad del planeta Tierra.
Darle a los humanos una buena lección; una merecida reprimenda.
Baste reflexionar acerca de cómo se inició, cómo se formó, cómo se diseminó el coronavirus podremos comprender la espiritualidad que lo creó, que lo recubre y que le otorgó vida.
El virus es perfecto. Es rebelde. Es escurridizo. Es microscópico. Es elegante: mantiene una geometría. Es inteligente: es capaz de mutar.
Quienes no somos científicos tenemos un enorme aporte que hacer al funcionamiento del mundo.
Reflexionar y mejorar.
NO SIGNIFICA ABRAZAR LA VIDA ESPIRITUAL
Simplemente reflexionar.
Por nuestro bien, nos conviene aprender a dominar habilidades humanas rezagadas todavía. La habilidad de dominar todo lo que haya que dominar en esta nueva cotidianeidad, y superar ese lamentable estado de "atrapado sin salida".
Porque no lo estamos: Tenemos mucho de bueno por hacer
y que podemos hacer.
Desarrollar la humildad: nos conviene admitir que no podemos competir con las fuerzas superiores. Se burlan del armamento, de las posesiones, de la jactancia, de las fronteras, de las diferencias, de la avidez de poder. Cuando todo parece haber llegado a un equilibrio, cuando parece que hemos conquistado algo de trascendencia, aparece un chiste de estos por parte de la naturaleza. Hoy es el coronavirus, mañana será otro.
Desde luego, atrapado en el hogar, te sientes sin energía para dedicarte a la reflexión o a cuestiones filosóficas. Pero el problema es que estas cuestiones están resultando imprescindibles.
Te sientes estresado, emocionalmente sobrepasado por las preocupaciones, los niños, el futuro profesional o laboral, la salud. No puedes pensar bien. En este estado surgen las rispideces, las personas caen en la tentación de entrar en peleas, discusiones. Presenciales o virtuales. No es ilógico ni es inhumano. Algunas situaciones pueden sacar lo peor de nosotros--- si lo permitimos.
Posiblemente ocurra que te encuentras sin disciplina o sin conocimiento.
Desarrollar la comprensión es otra tarea de interés.
Estar encerrado solo o conviviendo con otros, durante un período prolongado puede desquiciar la paciencia de cualquiera sea persona o animal. Nuestras mascotas también sufren estos cambios. No están habituados a compartir todas las horas del día con nosotros. Perciben que algo raro ocurre y se muestran intolerantes, o inapetentes. No quieren jugar con nosotros a la hora que nosotros decidamos. Buscan un rincón de la casa y duermen por demás. Se muestran ariscos. Por mucho que nos duela el comportamiento antipático o extraño de nuestros hijos o de nuestras mascotas, debemos desarrollar comprensión, compasión. Ellos también están estresados.
ACERCA DE LOS TRANQUILIZANTES
El estado de "atrapado sin salida" sin dudas desafía nuestra habilidad para manejar el estrés y para ordenar nuestros pensamientos. Sentimos la necesidad de recurrir a alguno de esos tranquilizantes que tenemos en casa. Sin embargo, una voz interior nos detiene: "¡cuidado!"
Sabemos que cuanto mucho, los tranquilizantes nos llevarán a estados de tranquilidad artificiosos, que durarán algunas horas al final de las cuales, volveremos al estrés. Por lo tanto, en estos momentos, los tranquilizantes son algo así como los amigos falsos, o los aduladores en tiempos difíciles que no nos ayudan a superarnos.
En este aislamiento forzado no hay salida: a la larga o a la corta, llega un punto en que debemos reconocer la necesidad de ser capaces de manejar nuestra cabeza y generarnos un estado emocional más satisfactorio y más efectivo.
Necesitamos poder contar con nosotros mismos.
Y para contar con nosotros mismos, debemos antes que nada, ser sinceros con nosotros mismos. De otro modo, no seremos seres confiables. De hecho, mucha gente no confía en sí misma. De manera que está comprobado que no avanzaremos en el objetivo de superar el estrés y superarnos si no nos sinceramos con nosotros mismos. No avanzaremos en nuestro proyecto si no conseguimos identificar los factores estresantes en nuestro caso particular. Y detectarlos, proceder a un examen de conciencia honesto y transparente requiere sinceridad y compromiso.
¿Sabes exactamente qué te trae a ti angustia, miedo, frustración, ansiedad, sensación de estar amenazados?
Sin duda, te lo genera un pensamiento.
Si no cuentas con alguien de tu confianza con quien conversarlo o hacer catarsis si tu estrés ha llegado a grados inmanejables, puedes mirarte al espejo y decírtelo; confesar abiertamente ese pensamiento; ese factor desencadenante del estrés en tu caso.
Articular el pensamiento; sacarlo afuera ya sea en una conversación con otro, o en estado de reflexión siempre será una experiencia liberadora. Incluso, puede resultar una experiencia bastante enriquecedora, esclarecedora. Al liberar la energía que se incuba en tu interior y que te causa estrés, haces espacio para expresar de una manera satisfactoria las emociones y los sentimientos que este estado te genera.
Así ocurrirá con tanta gente que en esta cuarentena descubrirá dotes artísticas y conseguirá expresar sus emociones en el canto, la pintura, la repostería, la escritura. En estas circunstancias en las que liberar el estrés será un objetivo primordial. Así como la expresión artística, también la actividad física en cualquiera de sus formas: (bailar, caminar, trotar, saltar, cocinar, limpiar la casa, ordenar el placard), resultará de gran utilidad.
También la meditación.
¿CÓMO LO HAGO?
Deja de lado por un rato tu pensamiento lineal; tu pensamiento lógico. Ya ves: el coronavirus parece desafiar la lógica humana.
Es tu oportunidad de "espiritualizar" tu pensamiento y darte la oportunidad de descubrir esos tesoros que conservas en las capas profundas de tu mente.
Anímate a conocerlos.
Apártarte por un rato para sincerarte, revisar tu circunstancia y descubrir exactamente qué es lo que realmente crea esas emociones que te estresan y darle nombre a esas emociones.
¿Angustia? ¿Incertidumbre? ¿Sensación de vulnerabilidad? ¿Soledad insoportable?
Hay remedio para todo ello.
Necesitas liberar el estrés. Puedes estar seguro de que al hacerlo,
grandiosos descubrimientos te esperan.
Una forma de liberar el estrés de manera efectiva sin duda es provocarse un estado de trance tranquilo y relajante.
Acercarse a la meditación.
Si bien es más fácil dejar que alguien te guíe en la meditación, puedes aprender a hacer sus propias autoinducciones.
En esta cuarentena antes que nada intenta atrapar esos factores que te generan estrés. Elévate por encima de las circunstancias. Propónete identificar estos factores que actúan en tu mundo interior pues al hacerlo, podrás dominarlos, comprenderte, trabajar sobre ellos y cambiar tu humor.
Al cambiar tu humor, harás espacio a las ideas brillantes, a las decisiones brillantes. Abrir la puerta a un cambio espectacular que todavía no conoces.
Nadie sabe hoy a ciencia cierta cómo será el mundo que se avecina. Dale la oportunidad a eso que los necios llaman "pensamiento mágico".
Dale a tu mente la oportunidad de crear para tí escenarios tentadores; de revelarte verdades más grandes y más útiles. Seguramente vamos a asistir a un cambio de paradigma mundial. Será mejor que estés preparado para producir un cambio oportuno en tu escala de valores.
En estado de relajación tendrás visiones y comprensiones mayores que no conseguirás con los tranquilizantes comunes.
Para empezar, inducirte a la relajación te ayudará a identificar en qué parte de tu cuerpo se aloja la tensión. Cada persona tensa músculos diferentes, y los tensa de manera personal y a un ritmo personal. La tensión muscular produce malestares. Trata de identificar los tuyos. (dolores de cabeza, de espalda, insomnio, etc.)
Siempre recordando que el estrés se inicia en la mente, que es algo psicológico que guarda relación directa con los pensamientos que recreamos podremos limarlo hasta hacerlo desaparecer por la simple razón de que si es algo psicológico. Entonces, es algo autoinducido. Ergo, puedes inducirte el tipo de pensamiento que consideres más apropiado.
Es solo cuestión de entrenamiento.
De ensayo y error.
De insistir e insistir hasta que tu mente comprenda que tú estás al mando.
Nuestro estrés es creado por nosotros mismos. Nuestras alegrías también. Creas el estrés con el mismo método con el que organizas una fiesta y te generas un estado emocional que se va agudizando a medida que vas pensasndo en los detalles de la fiesta.
Habrás notado que muchos otros pensamientos igualmente preocupantes ruedan tu mente pero no te causan estrés, independientemente de cuán intensamente pienses en ellos.
Lo importante a tener en cuenta a la hora de lidiar con el estrés es reconocer que cada pensamiento es un estímulo a tu sistema cuerpo-mente. Y que el estrés es el resultado final de lo que haces con ese estímulo.
Así es como creas tu estrés o tus alegrías independientemente de la realidad exterior. Si esto no fuera así, no existirían las personalidades "negadoras".
Con estas consideraciones en tu mente ya quedas listo y preparado para observar tus respuestas emocionales, tus expresiones verbales y conductuales. Y a lanzarte a una meditación más profunda.
Aprovecha esta cuarentena para concederte unos minutos cada día para relajar tu cuerpo y tu mente y abrirle la puerta a ese contenido subjetivo que se encuentra en capas profundas de tu mente.
Posiblemente haya mucho allí de lo que querrás enterarte.
Deja que tu subconciente se exprese y concédele la oportunidad de sorprenderte.
BENEFICIOS DE LA EXPERIENCIA
A la hora de hacer tus meditaciones, en estado de relajación, sin duda tu mente subconciente acomodará las cosas por ti. Siempre, para tu beneficio, para tu bienestar y para que tengas respuestas mejores y más sabias.
No se requieren habilidades mentales de alto nivel para captar esos pensamientos que te están estresando, que están elevando tu presión arterial e induciéndote a un estado en el que eres menos efectivo de lo habitual. Necesitas simplemente llevar a tu cuerpo a un estado de reposo.
Reposo pero sin dormirte para que puedas asistir a ese espectáculo sublime en el cual la mente subconciente nos revela pautas tremendamente útiles, acertadas e interesantes descubrimientos referidos a nuestra personalidad, o a la vida en general.
Nos planta en la nariz eso que siempre supimos pero no queríamos ver o no nos dábamos plena cuenta.
A los efectos de descubrir los factores que te estresan, simplemente relaja tu cuerpo manteniendo viva esta intención de relajarte. Puedes empezar tu ejercicio pronunciando solemne, (en voz alta si lo prefieres, como si pronunciaras el título del espectáculo que estás a punto de asistir), algo así como "Quiero descubrir esos pensamientos que me estresan y me producen xx emoción".
Luego, solo dejarte llevar.
Evita quedarte dormido y manténte atento tratando de observarte "desde afuera". Notarás en ti esas cosas que nota en ti cualquier observador ocasional.
- Puede que notes que estás exagerando, sobredimensionando algunas cosas. Y podrás identificar qué cosas estás sobredimensionando o exagerando.
- Puede que descubras que estás generalizando o inventando algunas cosas y negando la existencia de otras.
- Puede que descubras que te estás inclinando a pensar en lo malo y a descartar las cosas buenas que este particular momento de la vida te está ofreciendo.
- Puede que descubras que tu mente elige pensar en el pasado y sumirte en la añoranza o puede que se incline a pensar en el futuro y te suma en la preocupación, en la incertidumbre, en el miedo.
Cualquier cosa que descubras que se encuentre fuera del momento PRESENTE será producto de tu mente. Creaciones mentales que te llevan a sentir cosas.
Tu propósito en tus momentos de relajación y meditación será descubrir esas distorsiones clave que te amplifican el estrés. Cuando las descubras, tendrás la mitad del camino recorrido en tu desafío por cambiar el contenido de tu mente, liberar el estrés, sentirte mejor. Más pleno y más productivo.
La vida está hecha de dias que no significan nada
y de momentos que significan todo
¿Te animarás a comprobarlo?
Te deseo hermosas experiencias y rutilantes descubrimientos en tus meditaciones. Y también éxito y alegrías en cada una de tus aventuras florales si acaso sientes interés por las prácticas con Flores de Bach.
"Solo con que podamos apartarnos un rato todos los días, perfectamente solos y en un lugar tranquilo, sin que nadie nos interrumpa, y sentarnos…veremos después de un tiempo que esos momentos nos ayudan mucho y que en ellos tenemos como flashes de conocimiento y de consejo. El método perfecto para conseguirlo es mediante el pensamiento y la tranquila meditación y logrando una atmósfera de paz tal que nuestra alma pueda hablarnos a través de la conciencia y la intuición y orientarnos de acuerdo a sus anhelos".
Edward Bach
Con mis mejores deseos.
¡A tu salud!
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